Crónica del Comité Científico de las XXXIII Jornadas de Economía de la Salud (Santander, 18 – 21 Junio, 2013)
Félix Lobo Aleu
Presidente del Comité Científico
Depto. de Economía. Máster de Evaluación Sanitaria y
Acceso al Mercado (Fármaco-Economía).
Universidad Carlos III de Madrid
Email: flobo@eco.uc3m.es
El encargo de presidir el Comité Científico responsable del contenido de las Jornadas de AES del año 2013 que me hizo la Junta Directiva de AES fue para mí una gran distinción. He tenido además la suerte de contar con un comité integrado por hombres y mujeres, economistas y médicos, españoles e ingleses, de una calidad profesional y humana fuera de serie: Fernando Rodríguez Artalejo, Manuel García Goñi, Pilar García Gómez, José María Labeaga, David Epstein, Roberto Nuño, Marta Pascual y Andrew Street. Trabajar con ellos ha sido un privilegio, pues a todos les adornan virtudes como la competencia técnica, la capacidad de trabajo, la solidaridad y la amistosa generosidad. La larga experiencia de AES en la organización de estos eventos, el apoyo de la Junta Directiva y la colaboración del comité organizador local presidido por David Cantarero hicieron llevaderas las tareas de decidir la temática del congreso, el programa de participantes y ponencias y filtrar ponencias y comunicaciones.

Con gran acuerdo, decidimos que las Jornadas giraran en torno a un título suficientemente expresivo: Crisis y Horizontes de Reforma de los Sistemas de Salud. Su despliegue en el programa concreto procuramos que fuera escrupulosamente riguroso y profesional. La crónica del desarrollo de las sesiones revela que el objetivo se consiguió en gran medida y las Jornadas de Santander creemos que alcanzaron la calidad a la que nos tiene acostumbrados nuestra Asociación.
Centrándome en las sesiones plenarias, puedo recordar ciertos acaecimientos y hacer algunas observaciones. La conferencia inaugural de David Stuckler había levantado gran curiosidad por su brillante y prolífica carrera académica y por sus combativas y comprometidas conclusiones. Digamos que su parlamento excitó aún más la curiosidad de muchos por descubrir en sus publicaciones los fundamentos técnicos en detalle de sus tesis.
El diálogo entre Beatriz González y Pedro Pita acerca de la crisis en España y Portugal estuvo a la altura de las expectativas. Son dos maestros que nos recordaron que la austeridad debe funcionar como una restricción y no como un objetivo y nos advirtieron de que en el futuro las cosas pueden ir a peor, dadas las previsiones de los planes de estabilidad presupuestaria. Beatriz insistió en la absoluta necesidad de evaluar los resultados en términos de salud y para la equidad de los recortes presupuestarios, en personal y otros recursos, y en la necesidad de una visión intersectorial no sólo centrada en el ámbito sanitario.
En otra sesión sobre el futuro de la investigación en Economía de la Salud, moderada por Ángel López Nicolás, José Mari Labeaga y Guillem López-Casasnovas presentaron ejercicios bibliométricos bien interesantes. El primero se fijó en las palabras clave más frecuentes en el propio programa de las Jornadas. El primer lugar se lo lleva la palabra evaluación. También comprobó los cambios temáticos en el contenido de cinco revistas internacionales del campo. Revelan que se presta más atención creciente al diseño y realización de modelos, efectos de los estilos de vida, educación y salud, sistemas sanitarios en países en desarrollo y crisis y salud. Guillem por su parte comprobó el contenido de los cinco artículos finalistas en el premio Arrow entre 2007 y 2013. El dominio de EE.UU., los métodos cada vez más sofisticados, la importancia creciente de la microeconometría y no de la macro, y el peso creciente de temáticas como la economía del comportamiento, los estilos de vida y la evaluación de políticas fueron sus conclusiones. Andrew subrayó la misión de la Economía de la Salud como orientadora de la política sanitaria.

No queríamos que la gravedad de los problemas provocados o destapados por la crisis en España nos hiciera perder una perspectiva más amplia que exige reconocer que seguimos siendo pacientes privilegiados, gracias a nuestro nivel de desarrollo socioeconómico y a las prestaciones de nuestro SNS. Por eso, otra sesión plenaria estuvo dedicada a cuestiones de salud internacional. En ella Richard Scheffler expuso muy documentadamente la debilidad de algunas de las estimaciones cuantitativas de la OMS sobre recursos humanos y Jed Friedman, sobre la eficacia de los incentivos bien diseñados en contextos muy variados.
La conferencia de clausura a cargo de Eddy van Doorslaer fue efectivamente magistral. Aportó las características y los resultados de un nuevo estudio de investigación desarrollado especialmente para ser presentado en las Jornadas. Concluyó que en España las desigualdades en salud relacionadas con la renta se han visto atenuadas por el mantenimiento a lo largo de la crisis, al menos hasta 2012, de las pensiones de jubilación.
No puedo extenderme en una reseña de las sesiones de ponencias. Oí muchas opiniones acerca de que su muy alto nivel fue la norma. Lo mismo puede decirse de comunicaciones y pósteres que se presentaron en número récord. Las cifras son las siguientes: se recibieron 189 comunicaciones orales y 82 pósteres. Las comunicaciones orales aceptadas fueron 108 y los pósteres aceptados, 139, tras un proceso de evaluación ciega por pares y con árbitro en caso de discrepancia.

Destaquemos también las nuevas mesas de "reflexión" en los mediodías de miércoles y jueves, antes reseñadas, la incorporación del inglés como idioma de trabajo en la difusión de la información y en ciertas sesiones, sin menosprecio del español, y la muy abundante asistencia de colegas de otros países europeos y latinoamericanos.
Todo ello expresa la calidad y la reputación que este congreso ha alcanzado en la profesión.
Es Grau, Menorca, 18 de julio de 2013
Deja tu opinión:
|